Ago-19-2010

Serias críticas al proyecto de acuerdo mediante el cual se faculta al Distrito a través del Foro Hídrico a comprometer vigencias futuras para la canalización de arroyos en diversos sectores de la ciudad, fueron lanzadas desde diversos sectores de la dirigencia local.

A través de dicha iniciativa se autorizaría al Distrito a transferir al Foro Hídrico recursos del Sistema General de Participación, para financiar los proyectos de saneamiento básico, diseño y construcción de canales pluviales en los barrios La Paz, Sourdís, Nueva Colombia, El Bosque, Los Ángeles, Los Girasoles, Las Cayenas, Santo Domingo, El Limón, Universal, Simón Bolívar, José Antonio Galán, Pinar del Río-Villas de San Pablo primera etapa.

Las vigencias que se comprometerían serían del orden de los 300 mil millones de pesos, provenientes del Sistema General de Participación, de las vigencias comprendidas entre el 2011 y el 2020.

Al conocer el proyecto de acuerdo presentado por el Ejecutivo al Concejo, el director regional de la CCI, José Ignacio Vengoechea se mostró sorprendido porque, según él, los ingenieros miembros de la entidad venían tratando el tema con el Distrito, pero sobre la base de una donación del gobierno español, para una solución integral del problema de los arroyos que surcan a Barranquilla. Esta solución, dice, tendría un costo cercano a los 400 millones de dólares.

Señaló que es saludable que el alcalde Char se interese formalmente por el tema, pero le parece inadecuado que solo se incluya en el proyecto las corrientes pluviales del suroriente y suroccidente, y no las del nororiente, que generan grandes problemas de movilidad cada vez que llueve.

“El ideal para nosotros sería que la cuenca nororiental de los arroyos se satisfaga de un solo envión. Que se pensara en la solución global del problema; no solo para los barrios del sur”, afirma Vengoechea.

Para el dirigente gremial, el problema de movilidad conlleva a falta de competitividad, y su principal preocupación es que la ciudad se vuelva poco competitiva por los grandes problemas de movilidad en el nororiente.

Acepta que el compromiso de vigencias futuras para financiar las obras es necesario partiendo de la base de que el Distrito está en Ley 550. Pero también señala que la plata de las vigencias futuras no sería suficiente para una solución integral al problema de los arroyos. “De pronto solo serían suficientes para los barrios del sur”, anota.

El académico de la Universidad del Norte, Jairo Parada, por su parte, cuestiona que se vayan a comprometer vigencias futuras para la ejecución de las obras, si se tiene en cuenta que el Distrito todavía se encuentra sometido a la Ley 550. “A mí me parece que hay cierto afán de hacer obras comprometiendo vigencias futuras, sin que el panorama de las finanzas distritales hacia futuro esté muy claro, sobre todo porque paralelo a eso se está hablando de una emisión de bonos de 150 mil millones de pesos”, advierte.

En su opinión, este tema debe ser producto de una discusión, no solo de Concejo y Alcalde, sino de la misma sociedad civil.

Según el director de Protransparencia, Horacio Brieva, está bien que el alcalde Char se haya planteado una salida al problema de los arroyos, pero cree que tratándose de una obra que demandaría una inversión cercana a los 290 mil millones de pesos, ameritaría la busqueda de una concurrencia de la Nación - vía Conpes - para que las finanzas del Distrito no se sigan comprometiendo más en el mediano y largo plazo, y para que la solución sea más totalizadora, de modo que Barranquilla reduzca sus indicadores de desastres y mejore en competitividad.

Fuente: El Heraldo